Hola de nuevo, Ed

Ed había vuelto a entrar en la vida de Juliet de la manera "menos esperada" para ella.  Había vuelto diciéndole que la echaba de menos, que no le faltase nunca, que ella le mantenía con vida, que no se hacía una idea de lo importante que era para él, que lamentaba no poder hacerla feliz, que el tiempo que tenía para verla era insuficiente, que era preciosa, que la necesitaba.
Todo esto sonaba muy sospechoso, ¿verdad? Pues más aún cuando confesó que ya estaba olvidando a su ex. Y más aún teniendo en cuenta los sucesos de la noche de Halloween.
Después de un bonito reencuentro en las clases de música, Ed y Juliet decidieron ir a dar una vuelta y a merendar a casa de Ed unos donuts que su padre había comprado. La tarde transcurría con normalidad, teniendo en cuenta que Ed se pegaba mucho a Juliet; la mimaba, la miraba y le sonreía más de lo normal.. Aunque, claro, a Juliet eso no le importaba. Después de pasar un rato en el parque cercano a casa de Ed haciendo el tonto y riendo, subieron a la habitación de éste. Estuvieron haciendo una pelea de cosquillas y tumbados en su cama, dándose abrazos y besos en las mejillas y frente de vez en cuando y haciendo tonterías. Ed, en un par de ocasiones, tumbó a Juliet, la sujetó y le mordió suavemente la cara mientras luego se reía de la expresión de nuestra pequeña, sabiendo que esto causaba reacciones "divertidas" en ella. Todo era... ¿perfecto es la palabra? Luego bajaron a ver la tele. Juliet se recostó en el pecho de Ed, y él empezó a acariciarle la cara y el pelo. Juliet se dio media vuelta, cerró los ojos y se dejó llevar un poco. Aquello se sentía genial. Tras un pequeño sueño, la monumental idiota, abrió los ojos y vio a Ed mirándola y sonriéndole de manera divertida. Después de unas largas y apacibles horas, el claxon del coche de la madre de Juliet sonaba afuera. La pequeña recogió sus cosas y se dirigió a la puerta. Ed le dio un tierno beso en la mejilla, y al ir ella a devolvérselo él giró la cara, pero nada ocurrió. Juliet frenó en seco, bajó la cabeza, titubeó y finalmente le dio un besito de buenas noches. Tras eso, todo transcurrió medianamente normal.
Simplemente, Ed parecía escribir cosas en Twitter dedicadas a Juliet, y ella le respondía; porque claro, ¿os habréis dado cuenta de que Juliet está enamorada de Ed, verdad?
Todo el mundo insistía en que él sentía lo mismo, pero ella no estaba convencida. Simplemente se dedicaba a esperar y a disfrutar de sus momentos con él. Y de hecho, la espera sería más larga de lo que pensaba.
Pero el corazón es más caprichoso que impaciente.

Todavía te quiero, Ed, y sueño todas las malditas noches contigo.